Familia: Identidad, Retos y Esperanza
79 familia: identidad, retos y esperanza el contacto constante de los niños con la familia nuclear y extendida. Esto se debió a las nuevas demandas de una sociedad en pos de la industrialización, en la quemuchas madres comenzaron a trabajar al igual que los padres y las funciones de crianza, tradicionalmente asignadas a éstos, tuvieron que ser delegadas. Durante las décadas de los 40 y 60, con la llamada operación “Manos a la Obra”, se promovió la industrialización y la emigración de la Isla, causando también el rompimiento físico y psicológico de muchas familias. Desde mediados del siglo XX, Puerto Rico comenzó un proceso dirigido al crecimiento poblacional de ciertas ciudades, razón por la cual, hoy Puerto Rico se ha convertido en un país predominantemente urbano y pobremente agrícola. López-Cruz (2005) sostiene que, durante el proceso de industrialización, muchas familias se movilizaron a las zonas urbanas, pero los cascos urbanos no contaban con la infraestructura idónea para sostener esta movilidadmasiva. Esta situación provocó graves problemas de vivienda, empleo y salud, especialmente entre la población de escasos recursos, que se ubicó en arrabales y barriadas sin ninguna planificación. Así surgió una nueva clase de pobreza posindustrial, la llamada “pobreza urbana”. Para la década del 50, hubo un marcado crecimiento económico, caracterizado por adelantos tecnológicos, mayor nivel de educación y mejoras infraestructurales que facilitaron una oferta de mejores empleos. Esto permitió el nacimiento de una pequeña clase media que, poco a poco, ha asimilado el estilo de vida consumista e individualista de un país capitalista y corporativo, pero con marcada tendencia hacia la dependencia (Scarano, 2008). el divorcio en puerto rico Desde un contexto más contemporáneo, podríamos mencionar que el fenómeno del divorcio ha sido uno de los grandes cambios que impacta nuestra instituciónfamiliar. DeacuerdoconBreaFalcón(2012), el divorcio ha sido un fenómeno que ha impactado significativamente la estructura familiar puertorriqueña al grado de crear diversos tipos de familias y nuevas estructuras familiares. No se puede negar que, en Puerto Rico, la cantidad de personas divorciadas ha ido proporcionalmente en aumento al comparársele con aquellas que están contrayendo matrimonio. El número de divorcios aumenta, mientras el de nuevos matrimonios se reduce (Brea Falcón, 2012). Estadísticas recientes señalan que para el
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