Democracia, Transparencia, Participación y Bien Común

101 democracia: transparencia, participación y bien común pública por el mero hecho de decirse éstos “creyentes” o “cristianos”? La religión es la mejor garante de una correcta orientación de la acción política, pues ella se dirige a la intimidad del hombre y vela por su desarrollo integral. La democracia también puede tener a la religión por aliada, en cuanto que complementa y sostiene su labor. La religión forma parte de la rica diversidad de la sociedad civil 19 y refuerza su autonomía frente al poder. Dios y la religión sí son parte consustancial en esa tarea que corresponde al Estado de buscar la participación y el bien común entre sus miembros. Consentir por éste (Estado) de la dimensión religiosa del hombre en todos los campos en que se desenvuelve; porque es en este campo donde se juega la posibilidad de un progreso y de una efectiva tutela de este derecho fundamental, o por el contrario su progresiva restricción, que conlleva la reclusión de la religión en el ámbito privado y su expulsión de la vida política, de la polis , hace patente lo lapidado por Benedicto XVI: “Donde Dios desaparece, el hombre cae en la esclavitud de las idolatrías, como han mostrado, en nuestro tiempo, los regímenes totalitarios, y como muestran también diversas formas de nihilismo e ideologías, que hacen al hombre dependiente de ídolos, de idolatrías; lo esclavizan” 20 . Concluyo, –como a su vez lo he hecho en mi tesis doctoral defendida recientemente en la Universidad Complutense de Madrid– con una frase del profesor Manuel Maceiras Fafián, que ha sido norte para mí, como cristiano y creyente, en estos tiempos en donde comenzamos a sentir un sutil viento de “laicismo a lo criollo” en nuestra polis boricua: “La herencia cristiana nos elevó a hijos de Dios, en un mundo de seres libres y solidarios, transitando un tiempo convocado por la esperanza”. Gracias. 19 Cfr. S. Gregg, La libertad en la encrucijada , pág. 161. 20 Benedicto XVI, Audiencia , 15 de junio de 2011.