Democracia, Transparencia, Participación y Bien Común

95 democracia: transparencia, participación y bien común LosTalleresde laComunidadtomabanmuyenseriosutrabajo. Estudiaban las recomendaciones de los Talleres de gobierno y llevaban a cabo sus propias investigaciones. Sus reuniones para formular conclusiones y recomendaciones sobre las políticas que proponían los Talleres de gobierno generaban unos intercambios bien pensados y fuertemente argumentados sobre enmiendas a las políticas públicas propuestas por los Talleres de Gobierno. Para dar una idea del nivel de participación, podría señalar que, en torno al tema de la sustitución de importaciones que se discutió en el Taller de la comunidad sobre el costo de vida, intervinieron con estudios y recomendaciones un representante de la Asociación de Industriales, el director del Instituto de Investigaciones de Problemas de Consumidor de la Universidad de Puerto Rico, un representante de la Cámara de Comercio, el Presidente de la Liga de Cooperativas de Puerto Rico, un representante de la Asociación de Pensionados, el Presidente de la Asociación de Agricultores, representantes del Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores, otro de la Unión de Tronquistas, un representante de la Asociación de Detallistas y otros que sería prolijo mencionar. Mediante la participación en los Talleres de la Comunidad, abrimos un canal eficaz de participación que posibilitó que la ciudadanía, de forma organizada y sistemática, influyera en la política pública. Los Talleres del Gobierno funcionaron durante todo el cuatrienio al igual que los Talleres de la Comunidad. La democracia que establece nuestra Constitución provee al pueblo puertorriqueño las medidas para ejercer su voluntad y proveerse a sí mismo el gobierno que pueda enfrentar los enormes retos que tenemos por delante; la crisis fiscal, al impago de los acreedores, la contracción de los servicios esenciales de gobierno, y la depresión que ha hundido la economía. Para darle al país el gobierno que pueda superar ese reto, los electores, a su vez, tienen que superar los condicionamientos ideológicos que determinan el voto que emiten en las urnas. Tienen que informarse sobre las causas de estos problemas y la viabilidad de las soluciones. Informarse es una responsabilidad cívica que los ciudadanos tienen que cumplir para que la democracia funcione bien. Informar es una responsabilidad cívica que los medios tienen que cumplir para que la democracia funcione bien. Del entrejuego de estos factores –la superación de los condicionamientos,