Yo soy cristiano: Identidad, misíon y testimonio ¿Quién soy? ¿Por qué lo soy? ¿Cómo lo vivo?
114 actas del quinto congreso católicos y vida pública fecha exacta de su natalicio está hoy en discusión, unos dicen que fue en 1470, otros sostienen que en 1480. Fue bautizado en la parroquia de San Nicolás Obispo, figura que habría de recordar siempre, incluso, trasladar a México, denominando así al Colegio de San Nicolás, antecedente a la hoy Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, en Morelia. Realizó sus estudios en la Universidad de Salamanca, donde se tituló de licenciado en cánones. Dicha Universidad, como bien sabemos, hacía florecer el humanismo cristiano en el contexto del renacimiento español y una reforma cristiana preocupada por la trascendencia del mensaje evangélico en la vida social. Se vivían tiempos de convulsión religiosa, social y política. España se reorganizaba tras la expulsión de los musulmanes y consolidaba las conquistas en su propio territorio y en las tierras de América. Se reflexionaba y discutía, también, sobre la legitimidad de la conquista y los derechos de los indígenas, en un ejercicio intelectual y moral sin precedentes, que marcaba el nacimiento del derecho internacional. En este contexto, en las antiguas tierras Purhépechas se produjo un encuentro que las marcaría desde entonces. Michoacán era escenario de una temprana evangelización que empezaba a florecer en los indígenas, cuando el oidor Nuño de Guzmán, miembro de la Primera Audiencia que gobernó a la Nueva España tras la conquista y mandato de Hernán Cortés, sentó sus reales para explotar y dominar a los indígenas, aliado con encomenderos ambiciosos que con sus actos desacreditaron las verdades y virtudes propuestas por el cristianismo y enseñadas y vividas por los frailes. Como reacción, los indígenas que habían podido contener a los aztecas, se rebelaron a la esclavitud que les fue impuesta y se dispersaron por cañadas y montes. La Primera Audiencia se caracterizó por sus abusos que es lo que la llevó a confrontaciones incluso con la Iglesia. Las voces de inconformidad y los informes que llegaron a la Corona Española, llevó a nombrar una Segunda Audiencia para pedir cuentas y juzgar a los de la primera. Como parte de la segunda audiencia se integró al abogado Vasco de Quiroga, quien había dado muestras de prudencia y firmeza como juez de
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