Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868

224 ninguna acción en contra de Bertoly por haber abandonado sus deberes ni se le responsabilizó por los defectos de construcción del templo. Los temblores causaron estragos a la iglesia entre los años 1867 y 1868. Manuel Ubeda y Delgado aclara respecto a las condiciones de la iglesia en esos años: “Se ha habilitado para Iglesia, por haberse derribado la existente á consecuencia de los temblores de tierra de 1867 y 68, en una casa particular (...).” 111 El Gobernador, José M. Marchesi, escribió una carta al Ministro de Ultramar (1867) solicitando ayuda para la Isla. Era una época de mucha incertidumbre en términos sociales, políticos, y económicos. Los temblores repetitivos contribuyeron a agravar dicha crisis. Las constantes reparaciones de la iglesia indican que las construcciones o materiales de la época duraban poco o se deterioraban con mucha facilidad. La población fue aumentando, también los feligreses y comienza a apremiar una edificación nueva. No sólo era apremiante una nueva iglesia, sino una más grande y duradera. En pocas palabras, dicha edificación debía ser de mayor tamaño, construida en piedra y ladrillo. Se comenzaron entonces las diligencias para la construcción de una nueva iglesia después de veintisiete largos años. No se dispone de ningún documento entre los años 1868 a 1894. Tal parece que la transición de colonia española a norteamericana se presentía y se aspiraba en el aire. Los sucesos del Grito de Lares de algún modo crearon inestabilidad e impactaron la Isla. Del mismo modo la Carta Autonómica y la Invasión de los Norteamericanos causaron una incertidumbre y cambio de poder entre Estado e Iglesia. En 1895 se aprobó el Proyecto para el edificio-iglesia para el pueblo de Cidra con un presupuesto total de diecisiete mil novecientos noventa y siete pesos con ochenta centavos (17,997.80). Éste constaba de tres manuscritos: Memoria descriptiva, Planos y Presupuesto. 112 El arquitecto del Estado era Don Pedro Cabreras. 113 El presupuesto del Estado era de 6,000 pesos para el corriente año. Este manuscrito revela que los cidreños aún no tenían un edificio - iglesia. Es decir, el culto religioso todavía se celebraba en una pequeña casa de madera. La cantidad otorgada para la construcción de la iglesia era insuficiente. El arquitecto señaló que los 6,000 pesos sólo alcanzaban para una iglesia de madera y de reducido tamaño. Reforzó la idea de un edificio más duradero de mampostería. El Obispo recalcó que la obra podía comenzar con los 6,000 otorgados por el Estado y luego en el próximo año continuar con otro presupuesto. En la Memoria descriptiva se indica que aproximadamente cuatrocientas personas asistían a la iglesia. Se enfatizó la necesidad de un espacio de 159 metros 111 Ubeda y Delgado, Manuel. Isla de Puerto Rico. Estudio histórico, geográfico y estadístico de la misma . Puerto Rico: Establecimiento Tip. del Boletín, 1778, p.253. 112 A.H.N.M., Legajo 370, Exp. 4. 113 A.H.N.M., Legajo 370, Exp. 5. Dra. Frances Ortiz Ortiz