Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868

225 cuadrados, cuatro personas por metro cuadrado, con un total de 636. Don Pedro Cabreras consideró la posibilidad de un aumento poblacional en Cidra. Se planeó construir el edificio-iglesia en el área de la plaza, lugar donde había estado la antigua iglesia que quedó destruida por los temblores y los pésimos materiales de construcción. Pedro Cabreras señaló: “Según indican los planos consta la Iglesia de una sola nave de 16 metros de longitud por 8 metros y cincuenta centímetros de ancho. En el frente a la derecha, entrando de proyecto el baptisterio y a la izquierda la escalera que da acceso al coro el cual se sitúa en la parte central entre las dos torres. Se construirán escaleras en cada torre para el acceso al último piso, destinándose una de ellas para la colocación de las campanas y en la otra puede estar bien situado un reloj para el público. A la derecha é izquierda del altar mayor se proyectan las dos sacristías, pudiendo servir una de ellas para guardar efectos.” 114 La Memoria explica con lujo de detalles los materiales que se podían utilizar para la iglesia. Éstos eranmampostería ordinaria para los muros, ladrillos para “aristones” y “mochetas” de puertas y ventanas, arcos cornisas y pilastras, la madera de tabonuco para la armadura de la cubierta y forros de la tabla. Cabreras señaló la posibilidad de emplear losetas catalanas o mallorquinas para los pisos de la nave, presbiterio, baptisterio y sacristías. En la Memoria descriptiva señala: “Para la claraboya de la fachada del frente y para la de la fachada posterior, y para los medios puntos de las ventanas se proyecta la colocación de cristales de color y persianas para el resto de los huecos de las ventanas.” 115 Cabreras propuso que las obras se llevaran a cabo por la administración y no por contrato. La idea era aligerar los pasos de la construcción y poder terminar el edificio en un lapso de tiempo corto sin necesidad de subasta ni contratista. ¿Cuánto tiempo tardó en edificarse la iglesia? Los planos del 1895 no concuerdan con la foto antigua de la iglesia de Cidra del 1930. Ésta careció de la edificación pertinente para ese año. El pueblo de Cidra tuvo que esperar para ver su sueño hecho realidad. El Reverendo Padre Carlos Ormaechea le preguntó al alcalde Francisco M. Zeno si se podía trasladar el altar de mármol de la iglesia de Cidra hasta la Catedral de San Juan a cambio de algunas reparaciones. El altar había sido un regalo de Monseñor James H. Blenk a la parroquia. A pesar de que tenía un valor sentimental, el alcalde aceptó porque existía un deseo genuino por terminar la construcción de la fachada principal con su coro y sus torres. Pasaron cuatro meses sin altar ni reparaciones. El alcalde recibió por correo una carta de Ormaechea indicando que no podía costear los gastos de la iglesia y que dejaba el asunto en sus manos. 114 A.H.N.M., Legajo 370, Exp. 5. 115 AHNM, Legajo 370, Exp. 5. La Iglesia de Cidra: punto focal de la fundación...