Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868

57 cambio de los ilustrados. (Ver Los orígenes del pensamiento reaccionario, Madrid: EDICUSA, 1971). En las luchas entre la Iglesia y los liberales en el siglo XIX, la Iglesia volverá a publicar estos libros y otros de igual contenido, más directamente dirigidos a los liberales como el de Pedro Vélez, La apología del trono y el altar, publicado en 1825. En el mismo espíritu se acentuó la actividad de la censura en la Iglesia. La “previa censura” eclesiástica impuesta a los impresores que nació en la Iglesia casi con el nacimiento de la imprenta, a partir de la legislación de Alejandro VI contra la libertad de los impresores alemanes, renació con vigor en este período. Ello hizo posible que hasta entrado el siglo XX, se produjeron en España unos 105 índices y catálogos de libros prohibidos y expurgados, además de los de Roma, según documenta en su libro el padre Antonio Sierra Corella. 8 Esta teología católica española del llamado tradicionalismo de aquellos tiempos, que formó la cabeza de muchos de los clérigos enviado a Puerto Rico, no veía posibilidades de que el orden social y político fuera diferente al establecido porque entendía que éste había sido establecido por Dios con carácter permanente. Los teóricos del período descansaban en gran medida en teologías políticas como la de J. Jacobo Bossuet del siglo anterior, tutor del rey francés Luis XIV, nieto de Felipe II de España, quien postulaba el origen divino del poder, conferido al monarca directamente por Dios. Para Bossuet la monarquía era sagrada porque su poder era conferido directamente por Dios; por lo tanto, era absoluta, paternal, inviolable e inapelable. En consecuencia, el Rey sólo rinde cuentas a Dios, no a ninguna asamblea de hombres. 9 Concluimos de este ligero vistazo a los apologistas, que el liberalismo ilustrado y la teología política generalizada para la época, estaban en una posición antagónica irreconciliable, y listos para las luchas que habrían de darse en el siglo XIX entre la Iglesia y los liberales. Al girar el siglo y entrar en el siglo XIX español, las contradicciones materiales y sociales al interior de las sociedades católicas afectadas por la Ilustración y el naciente liberalismo, tomaron carácter revolucionario en Europa y América. La Guerra de Independencia de los Estados Unidos (1776), la Revolución Francesa (1789) y la Hispanoamericana (1810) inspiraran las más de cien insurrecciones de la llamada Revolución de 1848. Según los liberales, el peso de las viejas estructuras de origen feudal, especialmente la monarquía absoluta y la nobleza, a quienes la Iglesia “sacralizaban”, impedían el “progreso” y el camino hacia la “modernidad”. En el caso de España, los liberales entrarán en la escena política a partir de la invasión napoleónica, transformando la sociedad española y posteriormente, reaccionando a la alianza del trono y el altar, liquidarán el poder 8 En 1947, el erudito librero católico, P. Antonio Sierra Corella, publica La censura de libros y papeles de España y los índices y catálogos españoles de los prohibidos y expurgados, editado por el Cuerpo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos en Madrid, en el que hace el listado de los 105 índices y catálogos que había identificado, localizado y estudiado. Véase la lista de los índices y catálogos españoles en orden alfabético, con lugar y fecha de publicación y título completo en pp. 333-357. 9 Resistencia de la dirección de la Iglesia Católica...