Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868

59 La Santa Sede reforzó los esfuerzos de resistencia al liberalismo con tres sólidas encíclicas y el Sylabus dirigidos a combatir las ideas de estos dos gigantescos movimientos de las élites intelectuales y políticas de España, Francia e Italia. La Santa Sede condenó al liberalismo en Mirari vos en 1832 de Gregorio XVI, Quanta Cura y el Syllabus de Pío IX en 1864, y en Libertas Praestantissimum de León XIII en 1888. Gregorio XVI decía en Mirari vos : “De ese Senegal, fuente del indeferentismo, emana aquella absurda y errónea sentencia que afirma y defiende la libertad de conciencia… Debemos tratar en este lugar de la libertad de imprenta, nunca suficientemente condenada si se entiende por tal el derecho de dar a la luz pública toda clase de escritos, cuya libertad es por muchos deseada… Hay que luchar valientemente… para exterminar la mortífera plaga de tales libros”. El Papa llama a imitar el ejemplo de la Santa Sede en “condenar los libros sospechosos y dañinos” y condena “la doctrina que, no contenta con rechazar la censura de libros como grave y onerosa, llega al extremo de afirmar… que no está en la potestad de la Iglesia el decretarla”. Con respecto a la lucha política por someter a los príncipes a la Constitución y al gobierno parlamentario, la encíclica defiende “la sujeción a los príncipes, fundada en los santísimos preceptos de la fe cristiana”, y condena “la insolencia y gravedad de los que, afectados por torpes deseos de desenfrenada libertad, no se proponen otra cosa que hollar los derechos de los príncipes y reducir los pueblos a miserable esclavitud, engalanándolos con apariencia de libertad”. Acusa a los protestantes de iniciar ese proceso contra los príncipes. 13 Pío IX, por su parte emitió en 1864 la encíclica Quanta Cura y el Syllabus contra las principales libertades del Estado moderno implantadas en España, Francia e Italia, las cuales asediaban al antiguo poder político y económico de la Iglesia en esos países. La encíclica constituye una “especial condena” a cualquier Estado que defienda “la idea absolutamente falsa” del régimen político en que “la libertad de conciencia y de cultos sea un hecho libre de cada hombre, que deba ser proclamado y garantizado legalmente en cada Estado y que los ciudadanos tengan la más absoluta libertad para manifestar y defender públicamente sus opiniones… sin que la autoridad eclesiástica o civil pueda limitar su libertad”. Condena a todos los que niegan el derecho de la Iglesia al poder político secular y condena a los que alegan “que la Iglesia no tiene derecho de reprimir por medio de penas temporales a los que viven sus leyes”. 14 Pío IX, que se había iniciado como un Papa de tendencias liberales antes de sufrir los embates revolucionarios italianos, condenaba ahora en el Syllabus de 1864, que se afirme: “Que todo hombre es libre para abrazar y profesar la religión 13 Gregorio XVI, “Mirari vos”, Doctrina pontificia, colección de encíclicas y cartas pontificias, Buenos Aires: Ed. Poblete, 1944, pp. 37-48. El subrayado es mío. 14 Pío IX, “Quanta Cura (1864)”, Ibid ., p.812. Resistencia de la dirección de la Iglesia Católica...