Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868
65 periódicos, la Gaceta, El Investigador y Piedra de Toque . Los periódicos cumplieron una importante labor de pedagogía política, tanto por incluir textos de divulgación y educación, como por facilitar la discusión abierta de los problemas del país, del pueblo y hasta de los particulares. La composición de estos breves impresos, unas 4 a 8 páginas, era radicalmente diferente a lo que vemos hoy, pues no presentaban las noticias del día. Publicaban, en mayor o menor grado, información extraída de avisos del gobierno y periódicos de otros lugares, la entrada y salida de buques, estados financieros de la Hacienda provincial (gran novedad de la época), poemas, narraciones, historia, biografía, discursos y hasta artículos educativos de física y química. Sin embargo, una alta proporción de su contenido en ocasiones más de la mitad, se dedicaba a denunciar y comentar eventos por medio de artículos “remitidos” o “comunicados” al editor por particulares. Es decir, muchas páginas de los periódicos estaban dedicadas a lo que hoy llamamos “Cartas al Editor”. Estos artículos de opinión, usualmente anónimos, firmados sólo con iniciales o seudónimos, eran lo más extenso y, a veces, lo más atrevido de todo el ejemplar. El Investigador llegó a publicar en primera página un artículo titulado “Sobre el abuso actual de estar perpetuamente declamando contra los abusos anteriores”. 9 En contraste con los “remitidos”, el género de las “conversaciones”, muy frecuente, utilizaba el formato de preguntas y respuestas para denunciar un abuso, difundir una opinión o explicar un concepto. Sus autores recurrieron con frecuencia a la jerga campesina para hacer ver que hablaban con palabras sencillas y para lo que el historiador Francisco Scarano ha llamado “la mascarada jíbara”, disfrazar la opinión de los criollos educados como si surgiera del pueblo rural y expresarla de modo cómico para evitar confrontaciones directas. 10 La libertad de imprenta representó un problema constante tanto para los gobernantes de la Isla, siempre autoritarios por más liberales que se declararan, como para la jerarquía eclesiástica. La propia Gaceta del gobierno publicó en julio de 1820 una “Salve Constitucional” que habrá escandalizado a las autoridades religiosas, pues imitaba la tradicional plegaria a la Virgen María: “Dios te salve admirabilísima España, gloria y honor de todos tus hijos; Dios te salve CONSTITUCIÓN, santa madre mía la más hermosa, vida, dulzura y esperanza nuestra; por ti hemos suspirado, gemido y llorado seis años consecutivos de opresión y miseria; por ti hemos clamado los españoles todos en este valle de lágrimas…” 11 Seis semanas después (26 de agosto) los canónigos acordaron pedir se procesara el periódico El Investigador por “frases injuriosas” que publicó contra el cabildo de la catedral. 12 Probablemente se referían al “Artículo comunicado” por 9 El Investigador , 4 de febrero de 1822: 9-11. 10 Francisco A. Scarano. “The jíbaro masquerade and the subaltern politics of Creole identity formation in Puerto Rico, 1745-1823. The American Historical Review 1966; 101: 1398-1431. 11 “Salve Constitucional”, Gaceta, 5 de julio de 1820: 64. 12 Generoso Morales Muñoz. “Índice razonado de las Actas Capitulares de San Juan de Puerto Rico” Sacerdotes y libertad de prensa, 1820-1823
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