Iglesia, Estado y Sociedad Ruptura y Continuidad 1800-1868
78 les hicieron caso a los reglamentos que ordenaban fomentar los matrimonios y la unión familiar de los esclavos. El historiador Adam Szásdi señala que, constituye una notable excepción el Chantre D. Esteban González en 1808, en San Juan, respecto a su actitud hacia el matrimonio de esclavos. En su testamento declaró: “los cónyuges en mi estimación [de mi propiedad] son libres y su condición servil termina finalizada mi vida, de modo que no reconozcan otros señores.” 32 Los esclavos nunca alcanzaron una tasa de crecimiento positiva que fuera a bajar la dependencia del sistema de la importación de esclavos desde África como consecuencia de la alta mortalidad y la baja incidencia de nacimientos en las diferentes colonias de América. En Puerto Rico, debido principalmente al trabajo duro en grupos al que estaba expuesto el esclavo para la producción de azúcar, no le conducía a una larga vida. 33 La expectativa de vida de un esclavo en Brasil al nacer era de 23 años. Esta alta mortalidad también persistió en Cuba en el siglo XIX, y así debió de ser en Puerto Rico, pero menor en los Estados Unidos. Por la alta mortalidad, la trata y la entrada ilegal de esclavos desde África continuaron en las haciendas y plantaciones de azúcar en Cuba por muchos años más, 34 como también en Puerto Rico. Cuba y Puerto Rico, entre 1811 a 1870, importaron unos 600 mil esclavos de África. 35 Reveladora es la discusión en la Diputación Provincial de un oficio del Gobernador Salvador Meléndez Bruna en 1813, solicitando un informe sobre si sería conveniente la abolición de los esclavos o la continuación en la Isla del comercio de negros y por qué medio se podría suplir la falta para el fomento de la agricultura si cesara la esclavitud. La oposición a la entrada de “isleños canarios” para suplir la falta de esclavos predominó la tesis del presbítero puertorriqueño D. Antonio Sánchez, quien en 1810 era Secretario del Obispo Arizmendi. 36 Así reza parte de su tesis: De ahí la conveniencia de acudir al trabajo esclavo “y aunque es verdad que cada uno cueste al año lo que en alquilado en dos años, también lo es que mantiene y cuenta su valor como parte del capital, y no se halla expuesto a sufrir perjuicio que le causaría igual número de alquilados, yéndose como acostumbran hacerlo el día que les da la gana, dejando al hacendado en lo más crítico de sus zafras, cosechas o trabajos”. El hecho nos demuestra el pensamiento del alto clero sobre la abolición de la esclavitud y el trabajo de los esclavos. De esta forma, el planteamiento del presbítero influyó en la afluencia de bozales (los nacidos en África), en la Isla en años subsiguientes, con el régimen de licencias 32 Szásdi, op. cit.,p. 29, nota 68. 33 Davis, op. cit., p. 117. 34 Ibid, p. 117. 35 Philip D. Curtain, The Rise and Fall of the Plantation Complex. Cambridge, Cambridge University Press, 1990, p. 176 36 Rodríguez León, op. cit., p. 851. Al año siguiente, 1814, Sánchez fue favorecido para ser miembro del Cabildo de la Catedral por el Obispo Arizmendi. Rodríguez León, p.601. Dra. Ivette Pérez Vega
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