Cristianos en salida, santos del presente

Estado actual de la salud en Puerto Rico Dr. Francisco Cebollero, médico, Mayagüez, Puerto Rico Nuestro gobierno delegó hace dos décadas su responsabilidad con la salud pública a aseguradoras privadas. De facto, la política pública del gobierno es el lucro de las aseguradoras. Estas son corporaciones con fines de lucro y, por definición, su razón de existir es beneficiar a sus accionistas. Corporaciones con fines de lucro manejan el 100% del presupuesto de salud del país. Estas remuneran con salarios onerosos a sus principales ejecutivos. Por ejemplo, una de las corporaciones más grandes le pagaba a su principal ejecutivo, entre salarios y bonificaciones, tres millones de dólares al año. Para poner este sueldo en perspectiva, de acuerdo con la data de Fortune 500, este salario representa la media del salario que les pagan a sus principales ejecutivos las 500 empresas más grandes del mundo. Estos eran fondos mayormente públicos destinados a la salud. Puerto Rico es una isla relativamente pobre, con un presupuesto de salud limitado, que sufre un éxodo histórico de proveedores de servicios de salud por la paga baja que estos reciben. Se agrava este saqueo “legal” de fondos públicos con el hecho de que esta es la jurisdicción más pobre del gobierno de los Estados Unidos. La nación americana ostenta el costo más alto de medicamentos del mundo. En Puerto Rico, por ser un territorio perteneciente a los Estados Unidos, los tratamientos modernos de hepatitis C cuestan sobre 30 mil dólares por paciente, mientras que en otros países con alta prevalencia de hepatitis C, como Egipto e India, un tratamiento similar cuesta alrededor de mil dólares. El ingreso per cápita de la Isla corresponde a 1/3 parte del ingreso per cápita del resto de los Estados Unidos. Si se ajusta el costo de un tratamiento de hepatitis C de 30 mil dólares en Puerto Rico al ingreso per cápita promedio del resto de los Estados Unidos, el costo del tratamiento ajustado en la Isla es de $90 mil dólares por paciente.