El desafío de una educación solidaria
61 el desafío de una educación solidaria convincente, que un buen líder debe invertir la mayor parte de su tiempo en: planificación, preparación, prevención, clarificación de valores, fortalecimiento de relaciones, verdadera recreación y capacitación de su gente. 11 O sea, que uno puede tener el mejor compromiso con su ideal o misión, pero si no organiza ese entusiasmo no va a ser líder de mucha gente ni por mucho tiempo. He presenciado con gran frustración cómo se pierden esfuerzos y talentos por la desorganización y por falta de estrategia y planificación. Existen líderes con muchos talentos, pero que tienen una especie de alergia sistémica a sentarse a hacer un plan. Y un plan tiene que estar escrito y explicar: ¿De dónde van a salir los recursos humanos, y de logística? ¿Qué información se necesita para tomar las decisiones y poder implantarlas? ¿Quién estará a cargo de cada fase? y ¿Quién va a dar seguimiento a cada responsable? ¿Cuál es el calendario de cumplimiento? ¿Qué objetivos debemos alcanzar en determinada fecha? ¿En qué momento debemos evaluar si la estrategia está teniendo los resultados y cómo se han ido completando los objetivos? ¿Hay que cambiar o mantener el rumbo del esfuerzo? El talento de crear ideas, propuestas y programas es muchas veces diferente al de ponerlas en vigor. Es raro ver a una persona creativa y que este sea un buen administrador y viceversa. El identificar el recurso para cada encomienda es un arte; reclutarlo y mantenerlo no es fácil. Recuerdo una película de guerra, The Dirty Dozen, donde cada soldado tenía una especialidad distinta y esa es mi experiencia con la política. 11 Steven Covey, First Things First, Simon and Shuster, New York, (1994) Págs, 37, 218. Ver también del mismo autor, Seven Habits of highly Effective People, Simon and Shuster, New York (1989).
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