De los desafíos a la esperanza: propuestas de la PUCPR para una nueva gobernanza
63 de los desafíos a la esperanza: propuestas de la pucpr para una nueva gobernanza superpoblado y que, por lo tanto, somos impotentes e incapaces de autosostenernos. Eso ha contribuido, en gran medida, a que se haya adoptado la dependencia como el estilo de vida colectivo que, junto a otros factores también importantes, tienen al país en el hoyo económico en que se encuentra. Por consiguiente, es necesario reformar y cambiar todo el enfoque del sistema educativo. (Colón, 2020) Es apremiante educar desde los grados primarios y desarrollar en los niños capacidades que levanten el espíritu del emprendimiento y que sean capaces de contribuir efectivamente para que el país camine adelante por sus propios pies. El sistema de educación tiene que reformarse para, desde los grados primarios, se erradique el germen de la dependencia y se comience a reconocer que, como puertorriqueños, tenemos la capacidad de crear, valorar, gestionar, innovar, inventar, modificar nuestro ambiente, protestar y contribuir con el desarrollo del país. Como decía Nelson Mandela, la educación es fundamental para el desarrollo y la erradicación de la pobreza y el arma más poderosa para cambiar el mundo. Por todo lo anterior, sugerimos que es urgente elaborar un plan de desarrollo económico bien articulado y planificado, y con fuertes raíces en nuestras capacidades como país. Este paso es fundamental para enfrentar la pobreza; este mal se combate con trabajo, no con caridad y asistencialismo. Urge también enfatizar el conocimiento de nuestra historia, para comprender las raíces de la dependencia y la marginalidad. Insistimos, como la mayoría de los documentos citados en este escrito, en que debe reestructurarse el sistema impositivo para que sea más progresivo; debe aumentar el número de centros de cuido de niños; deben incrementarse los impuestos a las ganancias repatriadas, no como una medida confiscatoria de ingresos a ese sector, sino como un paso hacia la justicia redistributiva. Paralelamente, los esfuerzos para combatir la pobreza deben provenir del desarrollo comunitario con la ayuda del llamado tercer sector de la economía, es decir, aquel compuesto por entidades que no pertenezcan al sector público y no tengan ánimo de lucro, como lo son las organizaciones no gubernamentales, las cooperativas, las fundaciones, y otras. En síntesis, hay esperanza de erradicar la pobreza si se toman las medidas necesarias y precisas. Ojalá y exista la voluntad que resulte en el trazado del camino en la dirección correcta.
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