De los desafíos a la esperanza: propuestas de la PUCPR para una nueva gobernanza

73 de los desafíos a la esperanza: propuestas de la pucpr para una nueva gobernanza tiene como objeto dar a cada persona lo que se le debe, la responsabilidad de proporcionar los bienes y servicios que legítimamente reclame para su bien. La justicia, desde el enfoque ético, busca realizar las obligaciones y las responsabilidades que se requieran para alcanzar la meta de una buena comunidad. No es asunto de gustos o preferencias, no es lo que me gustaría hacer por los demás, sino lo que les debemos para su bien. Nuestro objetivo es presentar unos criterios y valores éticos que sirvan de referencia a la hora de desarrollar, en todos sus detalles, una política pública digna y justa de los servicios de salud para los ciudadanos. Un enfoque ético de la virtud de la justicia respecto al derecho de los servicios de salud, nos obliga a referirnos a la justicia distributiva. Esta se refiere a la distribución equitativa de los derechos, beneficios y responsabilidades o cargas de la sociedad. La aplicación del Principio de Justicia Distributiva conlleva unos criterios que sirven de guía para el uso de los recursos de salud ante las demandas de estos. En este caso hablamos de la obligación de la sociedad de atender las exigencias razonables de los ciudadanos. El derecho a la salud exige un acuerdo previo entre la sociedad y sus ciudadanos sobre lo que debe ofrecerse para el bien de la persona y el bien común. Reconoce que los recursos son escasos y que la demanda es superior, por lo tanto, exige una criteriología a seguir. Junto a la justicia distributiva, también hay que considerar la justicia igualitaria, que reconoce la dignidad humana de todos los seres humanos. Es fundamental que las personas, especialmente los más vulnerables, como son ciertas patologías que afectan a todos aquellos que se encuentran en el grupo de adultos mayores, sean atendidos en sus necesidades de salud con dignidad. En algunos casos el tratamiento puede convertirse, dada la situación del enfermo, en una acción desproporcionada, lo cual requiere que no se abandone al enfermo, sino que se ofrezca la medicina paliativa para acompañar con dignidad y con todas las atenciones de aseo, analgesia y alimentación en la etapa final de vida. Además, de la justicia distributiva, existe el campo de la justicia social, esta se refiere a la sociedad como un todo. Exige la obligación de proteger y promover los derechos y exigencias de todos los ciudadanos. El acceso o la atención a la salud es fundamental para el bien individual de cada persona, pero también para el bien de toda la comunidad social. El papa Juan XXIII, en su encíclica Pacem in Terris afirmó, refiriéndose