Koinonía 2007-2008

La familia en la cultura puertorriqueña 65 Un proceso, cualquiera que sea, implica la acción de ir hacia adelante en el transcurso del tiempo. Por lo tanto, requiere persistencia, constancia, honestidad y muchos otros valores que, por cierto, también están hoy en crisis. Desde nuestra visión educadora y académica, ¿qué entendemos por el concepto de familia?, ¿cuál es su valor?, ¿por qué es importante para la persona vivir en familia? El concepto de familia, como todos los conceptos referidos a la persona humana, es un término cuyo significado se mantiene en un delicado equilibrio dinámico con el entorno legal, social, histórico y de progreso científico-tecnológico. La familia no nace en el vacío, al igual que la persona humana su naturaleza está insertada en el entorno cultural y social. Y ya sabemos que este entorno vinculante se desarrolla y verifica de una manera muchas veces unilateral y torcida, despertando crispaciones sociales, políticas, gremiales y personales. Son las ya consabidas crisis en su más extensa significación vivencial. Si reconocemos que la familia está en crisis, debemos reconocer, como lo afirmaba el Santo Padre, Juan Pablo II, que también nuestra cultura lo está. Pero, esté o no inmersa en crispaciones, la familia es por excelencia el contexto humano en el que los sujetos articulamos nuestras vidas a través de un entramado de significados que imprimen su sello particular en nuestra formación y desarrollo como personas. La familia es el ámbito donde se originan, construyen o destruyen, y se renuevan los significados y valores que las personas asumen en sus maneras de pensar, valorar y actuar. Y cuando hablamos de significados no nos referimos a significados teóricos, sino vivenciales, a nuestras maneras de comportarnos todos los días. Veamos un ejemplo: preguntémonos acerca del significado y sentido que le otorgamos a valores como la honestidad, la responsabilidad, la prudencia, la justicia, la moderación, o cualquier otro valor que usted quiera. Si les pidiera que me dijeran qué entienden por estos términos, de seguro podrían elaborar definiciones brillantes. Pero más allá de teorías y conceptualizaciones, les pido que reflexionemos sobre la forma y manera en que practicamos estos valores