Koinonía 2007-2008

Familia y bien común 78 sacrificios y las responsabilidades propias del amor. Esta es la dirección en la que también nosotros, en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico hemos trabajados y queremos seguir trabajando, con la esperanza de no encontrarnos demasiado solos en esta ardua tarea. Responsabilidad educativa, la tienen, y grave, también los medios de comunicación social, que, a menudo, han contribuido a un clima de escepticismo y favorecido dinámicas de disgregación social más que ofrecer ejemplos y modelos reales y positivos. Por último pedimos a las instituciones civiles y al Estado que hagan una elección clara a favor de la familia, activando un proyecto orgánico e incisivo de políticas sociales. Esto requiere: 1. El reconocimiento jurídico, la tutela, la valoración y la promoción de la identidad de la familia, sociedad natural fundada sobre el matrimonio . Este reconocimiento debe establecer una neta línea de demarcación entre la familia, entendida correctamente, y las otras formas de convivencia, que, por su naturaleza, no pueden merecer ni el nombre ni la condición de familia. 2. El rechazo de todas aquellas técnicas de reproducción – como la donación de esperma o de óvulos; la maternidad sustitutiva; la fecundación artificial heteróloga – en las que se recurre al útero o a los gametos de personas extrañas a los cónyuges, porque dañan el derecho del hijo a nacer de un padre y de una madre que lo sean tanto desde el punto de vista biológico como jurídico. También se debería evitar cualquier forma de la llamada reproducción asistida , en cuanto tiende a separar el acto unitivo del procreativo mediante técnicas de laboratorio. No existe un “derecho al hijo”; en cambio, son evidentes los derechos de quien aún no ha nacido, al que se debe garantizar las mejores condiciones de existencia mediante la estabilidad de la familia fundada en el matrimonio y la complementariedad de las dos figuras, paterna y materna. 3. Una política de alivios contributivos que privilegie la familia y la ayude a sostener sobre todo los gastos para los hijos en el campo de la salud y de la educación.