Koinonía 2008-2009

minutos de reflexión a todos los estudiantes: el mito de una educación neutral sobrevive y es utilizado para justificar una enseñanza ideológica solapada o un espantoso vacío de valores existenciales. La lectura que el P. William Martínez Pastoriza nos hace de la Humanae Vitae de Pablo VI a la luz de la Teología del Cuerpo en Juan Pablo II tiene la capacidad de revelarnos, en cambio, la extrema racionalidad de la propuesta cristiana acerca del matrimonio y de la familia, es decir, su completa correspondencia a la totalidad de las exigencias humana. Otro ensayo de fina racionalidad es el de José M. Herrero Mombiela (“ De cómo armonizar el relato bíblico de la creación con la teoría evolucionista ”) que se adentra en el tema delicado de la teoría de la evolución en ocasión del doble aniversario del nacimiento de Charles Darwin y de la publicación de El origen de las especies : sin prejuicios ideológicos, ni forzosos intentos de reconciliación, queda manifiesta la riqueza de argumentos racionales propios de la tradición teológica cristiana que no entra nunca en contradicción con la auténtica investigación científica. Del mismo autor presentamos un breve artículo sobre el concepto de persona (“ Persona es quien ”) que constituye una de las aportaciones fundamentales del cristianismo al fatigoso camino de la humanidad hacia la toma de conciencia de la propia vocación y de la propia dignidad. La dignidad humana es evidentemente exaltada también en el mundo del trabajo y del éxito empresarial cuando se favorecen la participación democrática y el espíritu de solidaridad ( Fernando Collazo Collazo , “ La empresa como país ”). Y es precisamente gracias al misterio de la encarnación que hemos podido reconocer la grandeza del ser humano en todas sus dimensiones, incluso en aquellos aspectos que parecerían menos nobles, como son nuestras necesidades materiales: Ramón A. Guzmán Rivera en su ensayo sobre “ Jesús y la comida ” nos transporta al tiempo de los Evangelios, nos hace casi testigos presenciales de una humanidad nueva que entrando en el mundo renueva y da un sentido nuevo hasta al gesto humilde y cotidiano del comer. El Instituto de Doctrina Social de la Iglesia, plenamente insertado en las vicisitudes de la sociedad puertorriqueña, no podía quedarse al margen de las elecciones políticas de noviembre 2008. Por eso había convocado a todos los candidatos a la gobernación de Puerto Rico, para que aceptaran confrontarse con aquello principios, no negociables para los católicos, recordados por Benedicto XVI en varias ocasiones. Por diferentes razones un solo candidato pudo aceptar la invitación del 6