Koinonía 2012-2013

68 koinonía | anuario 2012-2013 foros, internacionales y estatales, se ha reconocido que la comercialización del alquiler de vientre constituye una forma de explotación corporal de la mujer. ¿Qué podrá impedir ahora el desarrollo de una clase de “mujeres reproductoras” en Puerto Rico? ¿Qué mecanismo jurídico o cuál institución garantizará que la presión económica no sea la causa principal para que mujeres de escasos recursos económicos recurran a la alternativa de ser madres subrogadas? Valdría la pena volver a leer el prólogo de la Constitución de Puerto Rico: “Consideramos factores determinantes… la fidelidad a los valores del ser humano por encima de posiciones sociales, diferencias raciales e intereses económicos”. O el artículo II, sección 1: “La dignidad del ser humano es inviolable”. ¿Autorizar la maternidad subrogada “con ánimo de lucro” es ser fieles a los valores del ser humano por encima de los intereses económicos? ¿Favorecer el uso de la mujer como “máquina reproductora” es afirmar que “la dignidad del ser humano es inviolable”? No hay partido con un proyecto de país que pueda eximirse de contestar a estas preguntas. (Artículo publicado en El Nuevo Día, 30 de agosto de 2012, p.80)

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