La convocatoria de una semilla: Fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de Puerto Rico | Cuarta Edición

185 la convocatoria de una semilla: fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de puerto rico de status para facilitar el camino a la estadidad y debilitar el Estado Libre Asociado con un lenguaje que negaba la existencia de un convenio y afirmaba los poderes plenarios sobre la Isla. A su radicación en 1996 el liderato autonomista reaccionó con indignación: En conclusión, este proyecto no hace justicia al buen nombre de Estados Unidos. Es mezquino y desdeñoso de la voluntad que el pueblo de Puerto Rico ha expresado libremente por casi medio siglo, en apoyo al Estado Libre Asociado. […] Sepan ustedes, señores congresistas, que a este pueblo se le respeta. Que nuestra dignidad no está a la venta, ni mucho menos está dispuesta a ser humillada. Sepan ustedes, señores congresistas, que este pueblo, respetuoso siempre de los demás, mira con igualdad a los hombres en las astas de la libertad. Sepan ustedes, señores congresistas, que Puerto Rico ni se rinde ni se vende. 333 El PPD en 1996, bajo el liderato de su entonces Presidente, impulsó enmiendas al Proyecto Young, las cuales ocasionaron su retiro. En la consideración de los proyectos Young, la discusión del idioma español y como vehículo de instrucción en las escuelas públicas de Puerto Rico tomó notoriedad. La propuesta de estadidad jíbara que contenía el uso del vernáculo en las escuelas como medio de instrucción, y el inglés como medio de unificación nacional era asunto de debate en el Congreso. De hecho, para la admisión de los estados de Luisiana, Nuevo México y Arizona se había exigido como condición para la estadidad. Los congresistas liberales Luis Gutiérrez y Nydia Velázquez unieron fuerzas con sectores conservadores y organizaron un ataque concertado al doble discurso sobre el idioma inglés en la estadidad. 333 Véase el mensaje del presidente del PPD en las vistas del Comité de Recursos de la Cámara de Representantes de Estados Unidos de Puerto Rico el 23 de marzo de 1996, en: Héctor Luis Acevedo, La voluntad abre caminos, San Juan (1996), pp. 271,274.