La convocatoria de una semilla: Fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de Puerto Rico | Cuarta Edición

205 la convocatoria de una semilla: fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de puerto rico calidad de vida disminuida del quehacer de pueblo se está haciendo realidad. Es un deber moral y político encontrar nortes de superación. Lo hemos hecho antes. Puerto Rico como pueblo ha crecido ante la ampliación de consensos mínimos por la gran mayoría de su gente. Ambos pueblos, Estados Unidos y Puerto Rico, deben reconocer que las grandes amistades se nutren del reconocimiento y el respeto de las diferencias básicas. El respeto de los adversarios es indispensable para poder convivir. Para los independentistas, el status es su expresión de «la libertad»; la afirmación de nuestra cultura y la «soberanía» de tomar decisiones sin otro límite que lo nuestro. Para los estadistas, el status es la expresión de la «igualdad, la seguridad», de un status permanente y la participación en las decisiones que nos afectan. Para los autonomistas, la política es la búsqueda de la «afirmación puertorriqueña y las anchas libertades» de movimiento y las oportunidades que brinda la relación con Estados Unidos. Permítanme concluir con una reflexión personal. Luis Muñoz Marín dirigió a Puerto Rico por más tiempo que ningún otro líder en nuestra historia. En su último gran discurso en 1973, refleja su entendimiento de las esencias de nuestros fundamentos y dinámicas: El status político es para servirle a la calidad de vida que el pueblo de Puerto Rico quiera crear para sí mismo. Esto, tan ampliamente repetidas veces olvidado, está en las tres aportaciones básicas que le he podido hacer a mi pueblo. Y estoy convencido que el ELA, aún como está ahora, y más aún al llegar –en el tiempo que se tome– a su máximo desarrollo dentro de la unión permanente con Estados Unidos es el único status bajo el cual se pueden realizar los ideales de justicia y civilización de que hemos estado hablando. El status político, repitámoslo una vez más, repitámoslo una y cien veces, es para servirle a esos ideales humanos, no para desviar al pueblo del camino de realizarlos, no para bloquear y destruir ese camino. El pueblo de Puerto Rico quiere la unión permanente con los Estados Unidos. Lo ha demostrado consistentemente. Pero la quiere con el mayor ejercicio de su autoridad sobre sí mismo que sea compatible con esa unión. Oigo hablar de que si se aprietan o se aflojan lazos entre Puerto

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