La familia puertorriqueña: un acercamiento socio-histórico

28 cuaderno de investigación social y económica pontificia universidad católica de puerto rico demografía clásica, la tasa de fertilidad de un país que desea sostener un proceso de sustitución poblacional razonable debe mantener una tasa mínima de 2.1 hijos por mujer. En 1970, existía una tasa de 3.4 hijos, la misma se redujo a 2.3 en 1990 y a 1.7 en el 2006 (Marxuach, 2012). Conjuntamente con esta reducción crítica en la tasa de reemplazo poblacional, Puerto Rico sufre el impacto de que 8 de cada 1,000 puertorriqueños decidieron emigrar del país durante la década de 2000 al 2010. Este aumento en la emigración tuvo el efecto de acelerar la diminución poblacional en la Isla que se reflejó claramente en el 2010 cuando el Negociado del Censo Federal estimó que la población de P.R. se redujo en cerca de 200,000 habitantes. Un efecto esperado de estas tendencias es el envejecimiento de la población, ya que el sector poblacional que actualmente emigra se encuentra entre las edades de 22 a 40 años de edad (Marxuach, 2012). La emigración, a su vez, genera un distanciamiento afectivo entre los miembros de la familia que debilita los lazos de solidaridad y estima dentro de la estructura familiar. Se agrava también con el hecho de que la población de ancianos o adultos mayores contará con menos apoyo de cuidado por parte de su generación anterior, pues han emigrado, lo que exigirá unmayor compromiso del Estado. Asimismo, la emigración impacta adversamente la estabilidad económica de la familia y del país, todavezquesemanifiestaunaseverareducciónenlatasadeparticipación laboral. Esto, a su vez, produce la sobrecarga económica del trabajador que permanece en el país y que se ve obligado a cumplir con la deuda pública contraída por pasadas generaciones que actualmente asciende a cerca de $98,460 millones. Finalmente, otro aspecto que refleja la desintegración de las familias en Puerto Rico, es el problema de las personas sin hogar. Según la encuesta realizada por el Concilio Multisectorial en Apoyo a la Población sin Hogar, para el 2011 en Puerto Rico existía un total de 3,445 personas sin hogar dispersas a través de toda la Isla (Revista Perspectivas-Editores, 2011). El 26.8% de las personas contabilizadas informó que habían dormido en algún lugar sin techo el día anterior a la encuesta, el 10% lo había hecho en alguna casa o edificio abandonado y el 24.4% había pasado la noche en algún albergue de emergencia o transitorio. Como se esperaba, la adicción a sustancias continúa como la razón principal para la deambulancia con un 42.8% de los encuestados. Otras razones identificadas (33.6%) fueron los conflictos dentro del sistema familiar,