La familia puertorriqueña: un acercamiento socio-histórico

6 cuaderno de investigación social y económica pontificia universidad católica de puerto rico los cambios que ha sufrido en su estructura y cómo esta institución social y la población infantil de la Isla han sido impactados por las múltiples manifestaciones de la violencia y otros problemas durante las pasadas décadas. Aspiramos a que, mediante una descripción general de la realidad familiar puertorriqueña contemporánea, podamos contribuir a su entendimiento y protección, a su acogida como una institución que hay que considerar y a que sea centro de la promoción humana y de la evangelización. En el escrito, primeramente, se hace una breve mención de las perspectivas sociales que intentan explicar el origen y funcionamiento de la familia y cómo esta importante institución social es descifrada desde marcos sociológicos e históricos. Como parte de este intento, se esboza la perspectiva cristiano-católica con respecto de la familia y la importancia de la misma como garante moral y transmisora de valores fundamentales. La segunda parte describirá los cambios que se han manifestado en la estructura familiar puertorriqueña y el estado socioeconómico en que se encuentra. Asimismo, en la tercera parte se describirá la situación actual de la niñez en esta Isla y finalmente cómo diversas manifestaciones de la violencia impactan actualmente a nuestras familias. Unagradecimiento especial a laComisióndeEvangelizaciónparaPuerto Rico de la Conferencia Episcopal Puertorriqueña (CEP), y a la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico por autorizar este proyecto y ampliar el compromiso de todos con la familia puertorriqueña. la familia como institución social La perspectiva institucional de la familia ha sido planteada históricamente por teóricos de diversas tendencias (Hill, 2012; López-Cruz 2005). Fundamentalmente, cuando se habla de “carácter institucional”sociológicamente,seaducealhechodequelafamiliaposee dos cualidades que la constituyen como tal: permanencia y funciones. El primer rasgo de permanencia que se le otorga a la familia se deriva del hecho antropológico de que todas las sociedades o culturas conocidas han desarrollado relaciones de parentesco (Coontz, 2006; López-Cruz, 2005). En otras palabras, las relaciones familiares han acompañado al ser humano desde sus orígenes y, a pesar de los cientos o miles de años de historia que tiene la humanidad, estas relaciones aún se consideran el vínculo social primario de la sociedad (Juan Pablo II, 1986). Otra

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