La pobreza y los pobres en Puerto Rico: reflexiones desde la doctrina social de la iglesia y algunos lineamientos para la pastoral social

7 la pobreza y los pobres en puerto rico: reflexiones desde la doctrina social de la iglesia y algunos lineamientos para la pastoral social Una línea de argumentación paralela a esta es seguida por S.S. el Papa Benedicto XVI en la Carta Encíclica Caritas in Veritate (Benedicto XVI, 2009). En el mencionado documento, el Santo Padre planteaba que: “La riqueza mundial crece en términos absolutos, pero aumentan también las desigualdades. En los países ricos, nuevas categorías sociales se empobrecen y nacen nuevas pobrezas. En las zonas más pobres, algunos grupos gozan de un tipo de superdesarrollo derrochador y consumista, que contrasta de modo inaceptable con situaciones persistentes de miseria deshumanizadora. Se sigue produciendo el “escándalo de las disparidades hirientes” (# 22). Aquí quiero llamar la atención sobre diversas disparidades hirientes que podemos apreciar en el país. Por un lado, el establecimiento de centros comerciales gigantescos, ultra-modernos, y con una disponibilidad de bienes de consumo alejados de las posibilidades del promedio de los ciudadanos del país. Por el otro, se observa cómo, en muchas ocasiones, estas estructuras del comercio de lujo colindan con comunidades marginales o especiales, lo cual crea contrastes tan hirientes como las reseñadas por el Papa Benedicto XVI. Algo similar ocurre con la cantidad significativa de autos de lujo que transitan a diario por las calles, avenidas y autopistas de nuestro país. Esta situación contrasta con la ‘lucha diaria’ que enfrenta un gran sector de nuestra población al tratar de llegar a sus destinos: trabajos, universidades, escuelas, hospitales, entre otros, en un sistema de transportación masiva deficiente, poco confiable y en muchos de los pueblos del país, inexistente. Una vez más nos topamos con los “contrastes hirientes” puntualizados por Benedicto XVI y con el “abismo” entre sectores sociales señalado por san Juan Pablo II. De igual forma, el Papa Francisco en un discurso en el Congreso Internacional de la Fundación Centesimus Annus Pro Pontifice (Papa Francisco, 2013a) vincula el fenómeno del desempleo o el paro con la pobreza. Sobre el particular, nos plantea que:

RkJQdWJsaXNoZXIy NzUzNTA=