La pobreza y los pobres en Puerto Rico: reflexiones desde la doctrina social de la iglesia y algunos lineamientos para la pastoral social

8 cuadernos de investigación social y económica pontificia universidad católica de puerto rico Es un fenómeno el del desempleo –de la falta y de la pérdida de trabajo– , que está cundiendo como mancha de aceite en amplias zonas de Occidente y está extendiendo de modo preocupante los confines de la pobreza. Y no existe peor pobreza material, me urge subrayarlo, que la que no permite ganarse el pan y priva de la dignidad del trabajo. Ahora, este “algo que no funciona”, no se refiere solo al sur del mundo, sino a todo el planeta. He aquí entonces la exigencia de “repensar la solidaridad” ya no como simple asistencia con respecto de los más pobres, sino como repensamiento global de todo el sistema, como búsqueda de caminos para reformarlo y corregirlo de modo coherente con los derechos fundamentales del hombre, de todos los hombres. (Papa Francisco, 2013a) Al hilo del tema, debe puntualizarse que el fenómeno del desempleo en Puerto Rico es uno que ha estado históricamente vinculado al fenómeno de la pobreza. Respecto de este tema, los autores Bernardo Kliksberg y Marcia Rivera (2007) han señalado que: “… la pobreza puertorriqueña está ligada a altisimas tasas de desempleo y subempleo.” (p. 24) Igualmente, coincidimos con el planteamiento de estos autores quienes apuntan a que Puerto Rico padece una condición de desempleo estructural que ha provocado que la tasa de desempleo en nuestros tiempos (y al menos desde los 50’s) supere el 10% (Kliksberg y Rivera, 2007, p.25; Vera Rodríguez, p. 17). De hecho, según cifras del Departamento del Trabajo de Puerto Rico, para enero de 2015, la tasa de desempleo en el país era de 12.4%, cifra que equivale a 144,000 personas sin empleo en el país (Departamento del Trabajo yRecursos Humanos de Puerto Rico, 2015). Debemos recordar, que no se incluyen en este cálculo los llamados “trabajadores desalentados”, es decir, personas que no tienen empleo, que hicieron gestiones para conseguirlo, pero que ante la falta de oportunidades laborales en el país, cesaron de hacer gestiones para emplearse. Tampoco se incorporan