Perfil del cuidador informal del adulto mayor en Puerto Rico

57 perfil del cuidador informal del adultomayor en puerto rico cuentan con preparación relacionada con el cuidado de adultos mayores o en el área de la salud (95.2%) a pesar de que el 78.2% posee estudios universitarios que van desde grados técnicos hasta doctorados. En cuanto al aspecto socioeconómico, el 56% no tiene un trabajo asalariado, y para el 44.7% el ingreso anual es menor de $10,000 dólares. Sus fuentes principales de ingreso son: el seguro social, alguna pensión y/o ayudas gubernamentales (48%). Además, no reciben remuneración o aportación económica de familiares por el tiempo de cuidado que brindan al adulto mayor (96.6%). Esto ubica a este grupo de cuidadores dentro del umbral de pobreza, dado que, el indicador de pobreza estadounidense establece que una unidad familiar de dos personas que tenga un ingreso anual de $14,960 o menos es considerado pobre (Vera, 2013). Mientras que, cercano a este grupo, podría encontrarse un 20% adicional de los cuidadores del estudio que reportó un ingreso de $20,000 dólares anuales. Aún cuando se encuentran algo por encima del umbral de la pobreza, los costos relativos al cuidado, la composición familiar y los recortes en las pensiones, podrían estar acercándolo al mismo. Este aspecto económico amerita atención, dado que estos cuidadores pudieran haber dejado de aportar al seguro social o pensiones de retiro. Esto podría provocar que, cuando se convirtieran en adultos mayores y requirieran cuidados, no tuvieran una fuente de ingreso recurrente para atender esas necesidades. Debe recordarse que ya para el 2013, la fuente de ingreso principal para el 94% de la población de 65 años o más era el Seguro Social (Oficina del Procurador de las Personas de Edad Avanzada, 2015). Estos resultados son cónsonos en las características sociodemográficas de edad, género, parentesco, tiempo de cuidado y estatus civil, con los estudios de Buenfil et al., (2016); Rivera, Rosario y Cuevas, (2015); y Velásquez et al., (2016). En cambio, muestran discrepancias en lo relacionado a la edad y estatus civil con los resultados encontrados por Comelin, (2014); Navarro-Sandoval et al., (2015); Galvis et al., (2016); Santiago et al., (2016); y Alqahtani et al., (2018). En estos estudios los autores encontraron cuidadores de mayor edad y mayor número de mujeres casadas. Por otro lado, la escolaridad de los participantes fue uno de los resultados que muestra una diferencia marcada con otros estudios previos. Autores como Ávila y Vergara, (2014); Comelin, (2014); Santiago et al., (2016); Galvis et al., (2016); y Velásquez et al., (2016) encontraron

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