Revista Horizontes: primavera/otoño 2010 | Año LIII Nums. 102-103

17 RFJ : Panamá alimenta mis historias indirectamente, siempre que estén ambientadas en el país–lo cual ha variado en mis proyectos más recientes. En ocasiones, noticias o sucesos que en realidad han ocurrido en Panamá me proporcionan la semilla de una trama. En otras, tengo un tema que deseo explorar y entonces le pongo la lupa a Panamá para ver qué elementos me brinda. Como ejemplo está Veritas Liberabit : el enfoque son las relaciones de Sabrina, especialmente con su pareja. Sin embargo, esto se iba a enmarcar en un misterio a puertas cerradas, una tradición del género que deseaba homenajear. Entonces, miré a la sociedad panameña y ella me proporcionó personajes como la Directora de Migración, el especialista en bienes raíces, el integrante del crimen organizado chino y, además, la historia del desfalco bancario que aparece en sus páginas. HLC : La Sabrina que conocemos en La niebla, y con quien luego volvemos a encontrarnos en Veritas Liberabit, es un personaje que rompe los estereotipos latinoamericanos, ¿no es cierto? RFJ : Sí, rompe los estereotipos latinoamericanos, no sólo los masculinos sino también los femeninos. Construí el personaje de Sabrina con dos propósitos: hacer una protagonista distinta a la de Mirada siniestra , e inyectarle algo de originalidad al género que abordo con ella, que principal–aunque no exclusivamente–se ha destacado por detectives masculinos. HLC : Pero estás construyendo una heroína que debe insertarse, en América Latina, en un mundo tradicionalmente masculino… RFJ : Sentí que, como se contaría en primera persona, el monólogo interno femenino me ofrecía un mayor abanico de emociones para la historia. HLC : ¿Alguna característica en particular? RFJ : Con ella no intenté tomar ningún estereotipo social al diseñarla, en contraste con el elenco de Mirada siniestra en donde prácticamente cada uno representa más o menos alguno. Lo curioso es que ella sí interactúa con estereotipos en otros personajes y en los escenarios en los que se encuentra. HLC : ¿Puedes ser más específico? RFJ : Por ejemplo, en Veritas Liberabit hay varios conflictos sutiles con el machismo latino, como el hecho de que todos los hombres en su vida tácitamente han acordado que ella debe dejar su profesión de investigadora porque es muy peligrosa. Sabrina no toma eso nada bien. No es la trama principal, pero es parte de su vida cotidiana. HLC : ¿Cómo ha sido acogido? RFJ : El personaje parece entablar buena conexión con las lectoras femeninas, y sospecho que en eso ha influido que ella no es una alegoría deliberada de “empowerment”. Cuando conocemos a Sabrina en las primeras páginas de La niebla ella “ya es”, punto. Y ésa es mi percepción por haber crecido en una generación que ya no hace discriminaciones basadas en el género. Como autor te permite obviar los clásicos roles de novia, víctima o rehén en los personajes femeninos y darles un papel más interesante en la narración. HLC : ¿Cómo situarías al personaje de Sabrina en una película? RFJ : Me encanta el cine tanto como las novelas, aunque reconozco las grandes diferencias entre ambos medios. Cuando escribo tengo una película de la historia en la cabeza y la voy narrando. Por eso me apoyo mucho en los diálogos, y a menudo mis escenas están editadas como se haría un film. HLC : ¿ Algún ejemplo que quieras comentar? RFJ : Te doy dos ejemplos de la novela que estoy escribiendo: Primero, tenía una escena que imaginé editada visualmente de una forma dramática, pero que no funcionaba con la palabra escrita así que tuve que estructurarla de otra forma. Segundo, el capítulo que estoy escribiendo lo pensé como un “voice-over” de un discurso televisivo sobre las acciones de cada personaje en ese momento, y para mi sorpresa adaptarlo en la narración no resultó tan difícil como temía. HLC : En algunos pasajes de La niebla y Veritas Liberabit parecería que el lector lleva una cámara consigo… está presenciando una película. ¿Aprobarías que alguna de tus novelas fuera llevada a la pantalla grande? RFJ : Estaría contento y cooperaría con un proyecto de adaptar alguna de mis novelas al cine, consciente de que el cambio de medio exigiría cambios en la historia y su ejecución. Por otro lado, cuando escribo no me mido, y Mirada siniestra requeriría de mucha edición para que encajara en un formato de dos horas, mientras que La niebla necesitaría un presupuesto enorme. La que veo con más potencial es Veritas Liberabit . El año pasado me reuní varias veces con una persona interesada en adaptar La niebla a un guion, pero no sé en qué ha quedado el proyecto. HLC : Vamos a continuar por una senda que está muy en boga. ¿Crees que pudiera existir una compatibilidad entre la literatura y la tecnología? RFJ : Te puedo responder como escritor y como lector. HLC : Adelante… RFJ : Como escritor, tuve la enorme fortuna de iniciar mi carrera justo cuando la tecnología concebía herramientas que me han sido inmensamente útiles. Panamá es un mercado pequeño, y no hay un esfuerzo dedicado de parte de las editoriales locales para promover los libros, como por ejemplo ves en Estados Unidos, en donde es muy común que tan pronto un autor publica una

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