Violencia desde la desconexión moral

62 pontificia universidad católica de puerto rico (68) = -1.010, p= .365) y Tolerancia (t (68) = .287, p= .787. La medida de actitud a la violencia comparó con las puntuaciones de estudios anteriores, manteniéndose una actitud favorable hacia esta, con una tendencia al alza en favorabilidad, (M= 56). La percepción de la violencia, para varones, se mantuvo alta y clara, (M=55) y para las mujeres se observó una disminución en los promedios en comparación con las investigaciones anteriores, que, aunque no resultó ser estadísticamente significativa (M=53.66) indica moderada percepción de la violencia. En los estudios anteriores esta era alta y clara. Finalmente, en cuanto a los promedios obtenidos en la escala de tolerancia , pudo apreciarse un aumento significativo en la tolerancia a los actos violentos F (21) = 4.393, p= .05, eta cuadrado = .18. La media para varones fue de 38.20 y 40.06 para mujeres; ambos considerados alta tolerancia. Los datos de los dos estudios anteriores indicaron promedios considerados indicadores de moderada tolerancia (M varones= 24.69 y 27.52; M mujeres= 22.39 y 22.58). En cuanto a los hallazgos de esta investigación, utilizando una escala de desconexión moral validada para estos propósitos y realizada con estudiantes del nivel subgraduado (milenios) dichos estudiantes mostraron preliminarmente que la actitud favorable a la violencia y tolerancia a la misma parecen explicarse por el uso de los mecanismos de desplazamiento y difusión de responsabilidad, además de la justificación moral. En adición, tanto la justificación moral como la desconexión total parecen estar asociadas a la exposición a videojuegos violentos. discusión Los datos de esta investigación, por sí solos, no necesariamente indican que se esté observando confusión en la discriminación de los actos violentos sobre los que no lo son por parte de las mujeres, o que vaya en aumento la tolerancia a la violencia, pero levanta la duda y ameritaría mayor investigación, si se comparan con los resultados de las investigaciones anteriores. No obstante, el contraste de medias de las medidas de tolerancia, obtenidas en las tres investigaciones cuantitativas, parece indicar que según avanza la Generación del Milenio se tornan más tolerantes a la violencia. A su vez, en cuanto a percepción, esta pudiera estar comenzando a confundirse, dada la aparente “normalización” de la

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