Razones para la esperanza: solidaridad, subsidiariedad y bien común

39 razones para la esperanza: solidaridad, subsidiariedad y bien común los pobres de San Juan y áreas limítrofes, negros y blancos. A aquella escuela también acudían los ricos y estos aportaban lo que quisieran en la educación de los párvulos. La escuela de la calle Luna era gratuita”. El maestro pobre enseñaba gratuitamente. Entre su alumnos estaban Alejandro Tapia yRivera, José Julián Acosta, Román Baldorioty de Castro, Manuel Elzaburu, Lorenzo Puente Acosta, Francisco del Valle Atiles, Sotero Figueroa, José (Pepe) Laguna, Ildefonso Jiménez y Cayetano Espino, y también humildes estudiantes en situación de pobreza. De esa cantera de jóvenes salieron forjadores de la patria puertorriqueña y encauzaron también al país a la liberación de la esclavitud. Es una de las primeras escuelas de América donde se mezclaron blancos y negros, ricos y pobres por el esfuerzo de amor y solidaridad de este apóstol negro que se encamina a la santidad. Sería el segundo santo negro de América. No podemos dejar de mencionar entre estos personajes notables de la cristiandad en Puerto Rico, sobresalientes en la virtud de la solidaridad a la madre Soledad Sanjurjo, a la Madre Dominga Guzmán Florit y a la extraordinaria ponceña, Dra. Honoris Causa de esta benemérita universidad, Sor Isolina Ferré. Estos son solo unos pocos de muchísimos más que han entregado sus vidas por mejorar y ayudar al prójimo. Son modelos puertorriqueños que sirven de faro incandescente para las nuevas generaciones, que en este momento, más que nunca, deben estar máximamente dispuestos a una solidaridad y unidad patriótica para enfrentar y sobrepasar los retos que enfrenta Puerto Rico.