Koinonía 2010-2011

Las clínicas de fertilidad ofrecen varios servicios: fertilización in-vitro, inyección intracitoplasmática, congelación y almacenamiento de embriones, “assisted hatching” que es ayudar a que se empiece a desarrollar y pueda ocurrir el desarrollo del embrión para el embarazo; cultivo de blastocitos, diagnóstico genético Pre-implantación. En este último se realizan pruebas genéticas al embrión y los padres pueden decidir si se quedan con el embrión en desarrollo o no. Desgraciadamente, esto se ha convertido en un negocio. Lo estamos viendo cada vez más en los medios. La verdad es que esos embriones están siendo congelados en tanques de nitrógeno líquido y el descongelamiento y la implantación no son 100% eficientes. Algunos casos terminan en batallas legales, cuando las parejas se separan o divorcian y los embriones permanecen congelados. No se sabe el futuro de esos seres que permanecen en los tanques de nitrógeno líquido: ¿Qué va a suceder con esos embriones? (Síntesis de la ponencia presentada en la PUCPR durante el Foro: “El negocio de la reproducción asistida, ¿ha congelado la 1568?”, 25 de enero de 2011)