Koinonía 2014-2015

80 koinonía | anuario 2014-2015 abstracción con que se trata el drama de la enfermedad, del dolor y de la muerte, en otras palabras, el drama de la vida humana. No es extraño que sea así: en el fondo, no es más que el reflejo fiel de una sociedad donde todo, literalmente todo, está al servicio de la distracción y del olvido de las condiciones concretas de la existencia humana. ¿Existe experiencia de humanidad sin experiencia del límite y del dolor? No, a tal grado que donde no se acepta la hipótesis que el dolor pueda tener un sentido, no queda otra posibilidad que adelantar la muerte. Una última observación: nos dicen que esta propuesta de ley dará a los puertorriqueños la libertad de decidir si vivir o no el tiempo de sufrimiento y dolor que los separa de la muerte. Falso: esta libertad ya la tenemos. Todos tenemos la posibilidad de decir no a la vida en cualquier momento. Esta terrible posibilidad la dio el mismo Autor de la vida. Lo que quiere hacer esta ley es obligar al Estado, a los médicos y enfermeros, a los familiares, a ser cómplices de esta decisión. Con la excusa de conferirnos el “derecho” de darnos la muerte, esta ley crea en realidad el “deber” de dar la muerte. Con la excusa de ampliar nuestras libertades, nos están condenando a ser verdugos de nuestros hermanos hombres. (Artículo publicado en El Nuevo Día , 11 de febrero de 2015, p.60)