La convocatoria de una semilla: Fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de Puerto Rico | Cuarta Edición

176 pontificia universidad católica de puerto rico gobernador, Rafael Hernández Colón anunció un gran esfuerzo para resolver o adelantar el tema del status político de Puerto Rico. 319 Su estrategia consistió en convocar al liderato de los tres partidos principales y adoptar una posición común para presentar un frente unido en cuanto a asuntos procesales al Congreso y requerir el compromiso legislativo de implantar la fórmula ganadora en un plebiscito. Ese esfuerzo conjunto duró tres años de intenso trabajo tanto por parte de la Isla, como por los comités del Congreso, en particular el Comité de Energía del Senado, bajo la presidencia del senador demócrata J. Bennet Johnston, que era la que tenía jurisdicción sobre los asuntos de Puerto Rico. Se logró un entendido procesal de los partidos de Puerto Rico, y cada fórmula defendió su alternativa según las presentaban en los proyectos discutidos. Se celebraron vistas públicas y serias negociaciones. El presidente Bush favoreció el proyecto, a la vez que se declaraba partidario de la estadidad. 320 Durante todo ese proceso varios senadores expresaron reservas a una legislación autoejecutable y, en particular, con el tema de la estadidad. Igual había sucedido en 1946. Además, las renuencias de índole lingüística, cultural y económica estuvieron siempre presentes en el efecto político de añadir a dos senadores y cinco representantes, probablemente demócratas. No existiendo una alternativa de balance político con otra admisión simultánea, era un daño previsible al control republicano de unos cuerpos legislativos que habían estado casi empatados en varias ocasiones. En el caso de Hawái y Alaska, se dio paso a la estadidad tomando en cuenta la tendencia republicana de uno y demócrata del otro, para balancear el impacto político. El 20 de febrero de 1991 se llevó a votación en comisión la propuesta enmendada, que produjo un empate, lo cual equivalía a derrotarla. Diez demócratas en favor, uno en contra y nueve republicanos, todos en contra. Empate a diez. 321 Hernández Colón resumió con elocuencia lo acontecido: En virtud de los resultados, forzoso es concluir que la solución al problema del status de Puerto Rico no se viabilizará por el Congreso a través de un plebiscito que entrañe un compromiso obligatorio de su 319 Rafael Hernández Colón, «Reflexiones sobre la autodeterminación puertorriqueña» 65 Rev. Der. UPR , 430, 436, (1996). 320 Íd. 321 Ibíd ., p. 480.

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