Democracia, Transparencia, Participación y Bien Común

39 democracia: transparencia, participación y bien común saber afrontar juntos las grandes cuestiones del tiempo presente. Incluso más: el papa Benedicto XVI destacó con frecuencia la necesidad de la formación “de una nueva generación de laicos cristianos comprometidos” que sean “capaces de evangelizar el mundo del trabajo, de la economía y de la política”, y para ello “coherentes con la fe profesada, que tengan rigor moral, capacidad de juicio cultural, competencia profesional y pasión de servicio por el bien común” 27 La Doctrina Social de la Iglesia propone tres principios ideales, hoy en día muy actuales, como criterios de juicio y de construcción de la democracia: - la dignidad trascendente de la persona (que nunca se puede reducir a un fragmento de la naturaleza, a un elemento anónimo de la ciudad humana, al mero hecho de ser productor o consumidor dentro de una lógica economicista, a la pura condición de ciudadano del estado, sino que, a su concepción y desarrollo integrales, han de estar ordenadas todas las instituciones sociales); - la subsidiariedad (como tarea de la propia libertad y responsabilidad, en la participación asociativa y democrática, en vista de una sociedad civil abierta con una viva presencia de los “cuerpos intermedios”, superando la dialéctica estrecha entre las complejas ortopedias de acción del estado y la presunta mano invisible del mercado); - la solidaridad (como expresión de la caridad, especialmente con los más pobres, con los que sufren, los excluidos, los oprimidos, como buenos samaritanos y constructores de formas de vida más dignas y justas, que derriben los muros de la indiferencia y violencia, del egoísmo y de la desigualdad) 28 . Se podría afirmar que existe una especie de “programa”, de proyecto democrático, para este compromiso cristiano y esta convergencia ideal de la ciudadanía, a la luz del magisterio pontificio y, en especial de las enseñanzas sociales de la Iglesia. Sus puntos cualificantes serían los siguientes, apenas sintéticamente enumerados: • la defensa de la vida como don, desde la concepción hasta la muerte natural, que está en la base de todos los derechos humanos; • la protección y promoción de la verdad, la belleza y el bien del 27 S.S. Benedicto XVI, discurso a los participantes a la XXIV Asamblea plenaria del Consejo Pontificio para los Laicos, 21/5/2010. 28 Consejo Pontificio de Justicia y Paz, Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, Vaticano, 2004.