Koinonía 2007-2008

Educación y objeción de conciencia: el caso español 93 Los intentos de solución del problema A la vista de lo dicho es comprensible que asociaciones de padres y profesionales de la enseñanza intentasen ponerse al habla con la Ministra de Educación y otros responsables del Ministerio con objeto de llegar a un acuerdo en cuanto a los contenidos de EpC. Las autoridades educativas, siempre renuentes a esos contactos, han perseverado en su propósito manifestando a la opinión pública que la asignatura en nada lesionaba el derecho de los padres a educar a sus hijos de acuerdo con sus convicciones morales, que EpC era una asignatura amplia y flexible que respetaba el ideario de los centros porque admitía diversas interpretaciones y siempre se podría encontrar la que mejor se acomodase a los principios programáticos del centro educativo, además, ¿a quién podría molestar que se enseñase a sus hijos el respeto a la Constitución? A la vez en la página web del Ministerio se colgaban los materiales docentes que podrán utilizarse para impartir EpC. Pudo entonces comprobarse cuál era el contenido de esos materiales que, no hace mucho, hubieran dado lugar a denuncias por corrupción de menores (entre otros, “Alí Babá y los cuarenta maricones”, “comic” pornográfico que provocó un fuerte escándalo en la opinión pública y fue retirado ante las protestas de las asociaciones de padres). En cuanto a los textos, mencionaré nada más el elaborado por la Editorial Casals, llamada al orden por el Ministerio simplemente por afirmar como distintos y no equiparables la unión matrimonial entre varón y mujer y otro tipo de uniones (entre personas del mismo sexo) o por mantener que el derecho a la vida implica su respeto desde la concepción hasta su ocaso natural. Prueba evidente de la imposible compatibilidad entra la orientación de EpC con el ideario de muchos centros y la conciencia de muchos padres. La actitud del Gobierno, en resumen, ha hecho imposible una solución respetuosa con los derechos de los padres, únicos titulares del derecho a educar a sus hijos con arreglo a sus convicciones. ¡Libertad ! Por eso, el 1 de marzo de 2007, con el respaldo de veintiocho asociaciones y colectivos de padres, alumnos y personal docente, las organizaciones “Profesionales por la Ética” y el “Foro Español de la Familia” presentaban un manifiesto a la opinión pública denunciando “Educación para la Ciudadanía” como un instrumento de adoctrinamiento

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