Koinonía 2009-2010

Are Rights Always the Rights Answers? 24 derecho a morir” y “los derechos de los niños”― proveen un contexto que facilita abordar estos temas. El derecho a morir y los nuevos derechohabientes en el contexto de la bioética El derecho a morir es uno de los nuevos derechos que está siendo debatido Europa, así como en Canadá y Estados Unidos. Como muchos otros nuevos derechos, el derecho a morir tiene su origen en el derecho a la intimidad, probablemente la expresión más pura de la interpretación liberal del individuo. El derecho a la intimidad es muy atractivo porque procura liberar al individuo, emanciparlo de todos los obstáculos legales y sociales, y realzar la libertad personal. No es por pura casualidad que los derechos relacionados con la intimidad comenzaron a expandirse durante la década de los sesenta y los setenta del siglo pasado. A la luz de la intimidad el individuo se ve liberado de todo límite y apoderado para ser el amo de su propia vida. Tanto así, que la intimidad se está convirtiendo en el molde para crear nuevos derechos. Los derechos relacionados a la intimidad y a la autodeterminación han tomado un lugar prominente en el campo de las disputas bioéticas en torno a los márgenes de la vida. En estas disputas se encuentra al sujeto de estos nuevos derechos y a través de casos de derechos relacionados a la intimidad se descubre quién es este derechohabiente. Dos casos del Tribunal Supremo de los Estados Unidos sobre la terminación de la vida ofrecen un contraste revelador. Los casos son Cruzan y Glucksberg, las dos varas legales del “derecho a morir” en la jurisprudencia estadounidense. ¿A qué tipo de ser humano se refiere el razonamiento del tribunal? ¿Es él o ella un ser humano real, alguien que podríamos encontrar en cualquier lugar? En Cruzan 2 , el Tribunal Supremo de los Estados Unidos extrajo del derecho a la intimidad el derecho del paciente a rechazar tratamiento médico no deseado, aun cuando dicho tratamiento pudiera preservar la vida. La condición impuesta fue que la familia debía presentar pruebas claras y convincentes de que el paciente incapacitado desearía que se suspendiera dicho tratamiento. En Glucksberg 3 , el Tribunal decidió que la Constitución de los Estados Unidos no ampara el derecho al suicidio 2 Tribunal Supremo de los EE.UU. , Cruzan vs. Director, Departamento de Salud de Missouri, 25 de junio de 1990, 497 U.S. 261, 110 S. Ct. 2841. 3 Tribunal Supremo de los EE.UU ., Washington vs. Glucksberg, 26 de junio de 1997, 521 U.S. 702, 117 S. Ct. 2258.

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