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pontificia universidad católica de puerto rico
públicas que representaban las personas. Sometió como candidatos
a Cecil Snyder, juez asociado del Tribunal Supremo de Puerto Rico;
Roger Baldwin, director de la American Civil Liberties Union; Esteban
Bird, vicepresidente del Banco de Ponce; y Jesús T. Piñero, comisionado
residente en los Estados Unidos, quien debía ser la primera opción para
dicha posición.
159
Así, el 21 de febrero de 1946 el secretario del Interior Interino de Estados
Unidos, Oscar Chapman, le escribió al presidente Truman recomendando
a Piñero para gobernador en estos términos:
As legislator and Resident Commissioner he had to work closely with leaders
of the Popular Party and yet has demonstrated that there is no danger
of his becoming a rubber-stamp governor. His pleasing personality and
keen intelligence has won him many friends in Congress and in the Federal
Departments which would stand him in good stead as governor
.
160
Muñoz Marín respaldó a Piñero para gobernador y se opuso al
nombramiento del general Del Valle diciendo: «The appointment of a
mere Puerto Rican, such as General Del Valle, would be meaningless to
us. We are interested in the democratic significance of policy. We would
rather have, if it came to that, a liberal chinaman than a reactionary
Puerto Rican».
Ante la tenaz oposición del Partido Demócrata, del
Departamento del Interior y de Muñoz Marín, el presidente Truman
detuvo la nominación del general Del Valle, y luego este pidió que retirasen
su nombre de ser considerado por haberse dilatado su nombramiento.
El Director del FBI, Edgar Hoover, rindió un informe negativo sobre
el entonces comisionado residente Piñero por «alegadamente» tener
tendencias comunistas. ¡Increíble, pero cierto!
El nuevo Secretario del Departamento del Interior, Julius Krug, y Muñoz
Marín se reunieron el 5 de junio de 1946 con el presidente Truman.
El secretario Krug sostenía con Muñoz una agria discusión sobre el
nombramiento de Piñero, pues se oponía a que se nombrara a un oficial
electo, pues disminuiría la autoridad federal y provocaría un conflicto
de lealtades del gobernador entre el Presidente y el electorado que votó
159 Carlos R. Zapata Oliveras,
Luis Muñoz Marín, Estados Unidos y el establecimiento del Estado Libre Asociado de
Puerto Rico (1946-1952)
,
supra
, pp. 115-117.
160 Luis Muñoz Marín,
Mensaje del 26 de octubre de 1946
, reproducido en Héctor Luis Acevedo, editor,
Jesús T.
Piñero: el hombre, el político, el gobernador
,
supra
, pp. 353-354.