misa celebrada por ser mons. roberto octavio gonzález nieves, ofm
arzobispo metropolitano de san juan de puerto rico | parroquia santa teresita, santurce
9
social. Todos somos hijos e hijas del único Dios
Padre, amoroso, bondadoso y misericordioso.
17.4 Dice el Papa: “El que trabaja por la paz debe tener
presente que, en sectores cada vez mayores de
la opinión pública, la ideología del liberalismo
radical y de la tecnocracia insinúan la convicción
de que el crecimiento económico se ha de conseguir
incluso a costa de erosionar la función social del
Estado y de las redes de solidaridad de la sociedad
civil, así como de los derechos y deberes sociales.
Estos derechos y deberes han de ser considerados
fundamentales para la plena realización de otros,
empezando por los civiles y políticos.” Puerto Rico
nunca debe lavarse las manos ante las necesidades
sociales de sus habitantes. El estado tiene una
función social, que si la pierde, pierde su rumbo
y su sentido. Asuntos como la seguridad y salud,
educación y la familia, la identidad cultural y
nacional son los que ningún gobierno debe rehusar
atenderlos, ni delegarlos a terceros, ni sacrificarlos,
ni permitir y menos tolerar que se conviertan en
precarios.
17.5 Continúa el Papa: “Uno de los derechos y deberes
sociales más amenazados actualmente es el
derecho al trabajo. … reitero que la dignidad del
hombre, así como las razones económicas, sociales
y políticas, exigen que « se siga buscando como
prioridad el objetivo del acceso al trabajo por parte
de todos, o lo mantengan.” El trabajo no es otra
cosa que la respuesta humana al mandato bíblico
de ganarse el sustento con el sudor de la frente.
El trabajo resalta y enaltece la dignidad humana;
un pueblo que no trabaja es un pueblo que se
inutiliza; un pueblo que no puede crear empleos
es un pueblo que no puede crear futuro y se corre
el riesgo del éxodo de sus mejores recursos y de
forzarlos al éxodo de su propia patria.
18. Como lo hemos hecho con gobiernos anteriores, Señor
Gobernador Electo: hoy oramos por su gobierno,
para que sea sensible, equitativo, transparente
y sin pretensiones, solidario con los necesitados,