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viva la universidad | carta a sarita
lcdo. héctor luis acevedo
En ese mensaje caló en particular, pues los miembros
de una revista jurídica tienen la oportunidad de dejar su
huella escrita de donde se nutran otros seres, a veces jueces,
a través del tiempo. Es un poco parecido a las buenas obras
e ideas que retumban por siempre.
De ahí salimos entusiasmados a otra puerta y llegamos
a la puerta de un científico humanista de origen polaco,
llamado Jacob Bronowski,
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quien nos advirtió de cuidarnos
- De ellas está empedrado el infierno, así como de malas intenciones está
pavimentado el mundo de los hombres.
- Por esomismo hay que desempedrarlo y recalzarlo para las buenas intenciones.
- Pues entonces no hay que publicar la moral en libros sino en obras.
- Bien se ve que no bastan cuando nos calumnian.
- Son las calumnias de la propaganda en sentido contrario. Dejémosla pasar,
que eso no daña, pues el mérito del bien está en ser hecho aunque no sea
comprendido, ni estimado, ni agradecido, y vivamos la moral que es lo que
hace falta.
- Bien está –afirmaron con desidiosa afirmación–. Bien está, pero cuando se
pida a las doctrinas calumniadas las pruebas de su moralidad…
- Y ustedes ¿qué son, sino pruebas vivas de ella? ¿Acaso no lo son? Porque si
no lo son, a pesar de los esfuerzos que se han hecho, una de dos: o ustedes no
han acogido, sino por su parte externa las doctrinas, y en ese caso es inútil
difundirlas, o la sociedad en que viven es por sí misma un obstáculo para
difundirlas, y en ese caso.
- En ambos casos es preciso publicarla: en el primer caso para que pasemos
de fuera adentro de las doctrinas; en el segundo, para que disminuyan los
obstáculos.
- ¿Disminuir? Quizás aumenten. A la verdad, como las doctrinas más sinceras
son las que resultan más radicales, talvez, escandalícenlas sencilleces que yo
les he dictado. Mejor, ya que tanto empeño tienen los amigos de las buenas
intenciones, mejor será que solo se publique aquella parte de la moral que se
refiera a los deberes de la vida social.
- Pues bien, déjenos publicarla.
- Del país y de ustedes es. Tómenla y publíquenla.
- Y por eso, después de mucho urgirme y de no poco contrariarme, consiguieron
los jóvenes, a quien se deberá, si vale algo, que yo consintiera en la publicación
de la Moral Social.
2 JACOB BRONOWSKI, THE ASCENT OF MAN 374 (1973), expresa:
It is said that science will dehumanize people and turn them into numbers. That
is false, tragically false. Look for yourself. This is the concentration camp and
crematorium at Auschwitz. This, where people were turned into numbers. Into
this pond were flushed the ashes of some four million people. And that was not
done by dogma. It was done by ignorance. When people believe that they have