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la convocatoria de una semilla:
fundamentos y dinámicas del desarrollo constitucional de puerto rico
trabajo, la transportación y el ambiente, entre otros, hasta el crecimiento
de fondos federales en áreas como vivienda, alimentación, salud,
educación y desarrollo urbano. Se ha producido así una realidad nueva
en la que los programas de justicia social se han ido «federalizando» y
la administración local ha ido atrincherándose progresivamente en sus
iniciativas. El poder político ha ido de compañero leal a los programas
de justicia.
En términos reales, la ampliación de los programas de desarrollo social
y económico ha aumentado y se ha disminuido la pobreza extrema, así
como el poder político existente de los gobiernos de los estados y el de
Puerto Rico. Claro, poder sobre la nada o el hambre no es poder. Hay que
entender que en 1950 los programas federales eran mínimos.
Varios hechos históricos son importantes para entender el ambiente
en que se desenvolvió la Convención Constituyente. En agosto de
1947 se declaró la independencia de la India, iniciando un periodo de
descolonización en el mundo de las posguerras. En 1949 la Revolución
comunista triunfó en China, consolidando dicha ideología su poderío
con el país más grande del mundo en territorio: Rusia y el más poblado,
China.
La organización de la Convención Constituyente coincidió con la Revuelta
Nacionalista del 30 de octubre de 1950. Las inscripciones para la
aprobación de la Ley 600 fueron el detonador en tiempo del levantamiento
armado por cerca de cien nacionalistas, así como el atentado contra la
vida del gobernador Muñoz Marín y del presidente Truman.
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En el
atentado de La Fortaleza murieron cuatro de los atacantes, incluyendo
al comandante del Ejército Nacionalista Raymundo Díaz Pacheco. En el
atentado contra el presidente Truman, murió el policía Leslie Coffelt y
el nacionalista Griselio Torresola. Oscar Collazo fue herido y capturado.
Esos incidentes produjeron veintiocho muertos: siete policías, un guardia
nacional, dieciséis nacionalistas y otras cuatro personas.
183 José Trías Monge,
Historia constitucional de Puerto Rico
,
Tomo III
, Río Piedras: Editorial de la Universidad de
Puerto Rico (1982), p. 59; Miñi Seijo Bruno,
La insurrección nacionalista en Puerto Rico-1950
, Editorial Edil,
Río Piedras (1989), pp. 73-224; Luis Muñoz Marín,
Memorias 1940-1952
, Universidad Interamericana de
Puerto Rico, San Germán (1992), pp. 235-256; Néstor Duprey Salgado,
Independentista popular, las causas
de Vicente Géigel Polanco
,
Crónicas Publicaciones, San Juan (2005), pp. 539-549; Stephen Hunter y John
Bainbridge, Jr.,
American Gunfight, the Plot to Kill Harry S. Truman,
Simon and Shuster, New York (2005); y
Marisa Rosado,
Pedro Albizu Campos, las llamas de la aurora, 2.
a
Ed.
, Ediciones Puerto, San Juan (2006) pp.
347-373.