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Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico
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Guía e inspiración en el apostolado de la verdad, sea el amor,
Obrar la verdad en la caridad. (ef. 4,15). Que hermoso eslogan
para una institución católica, para nuestra Universidad: “obrar la
verdad en la caridad”.
Solamente realizando la verdad en nuestra vida, en los
pensamientos, en las palabras y en las acciones, seremos hijos de la
luz. El que obra la verdad, “viene a la luz”. (Jn 3,21)
Vosotros sois la luz del mundo y la sal de la tierra. La verdad,
sazonada por la caridad, es la mejor garantía de ser luz para los
demás y también sal de la tierra.
Sra. Marcelina, en el día de su instalación oficial como Presidenta
de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico, primera mujer
en regir los destinos de nuestra universidad y hasta donde tengo
entendido la primera mujer en presidir una Universidad Pontificia, y
la única en el mundo entero, en el momento actual, no es
pequeña, ni fácil la tarea que se desprende de la lectura del
evangelio, mas bien, diría, es retadora y fascinante, la que el Señor
ha tenido a bien poner sobre sus hombros: La de presidir la
Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico, llamada a ser faro
de luz diáfana del Evangelio, y sal que sazona la tierra y Centro de
estudio, cuya asignatura:
la verdad en la caridad
, acicate para
maestros y estudiantes impartir y alcanzar maestrías y doctorados,
les conduzca en sus trabajos y en sus vidas a pensar , honrar, decir y
hacer la verdad.
Que Santa Teresa de Jesús, cuya fiesta hoy celebra la Iglesia, mujer
y Doctora de la Iglesia, sea inspiración y modelo de su buen
quehacer como Presidenta.